Aguazul
Hoy este cuarto me parece más pequeño que nunca y mi vida más corta y más frágil, mis convicciones más confusas y mi amor a la vida más grande.
Creo que hoy entendí porque los antiguos veneraban a un dios del agua y un dios de la lluvia y un dios del sol....la verdad es que estando en medio de la selva todo parece divino, aún puedo sentir el perfume de la hierba, de esa vegetación salvaje que cubre todo, que invade qtodo y que sin ningún esfuerzo es capaz de ocultar los majestuosos rastros de una civilización milenaria, nunca olvidare el olor de todo ese verde, sé que nunca olvidaré ese perfume.
Tampoco olvidaré el sonido del agua entre las rocas, mienras las lava, las gasta y las amasa hasta que se transforman en figuras caprichosas. jamás en mi vida había visto tantos azules juntos y tan bellos todos, jamás había estado frente a un dragón de agua, rogandole con el pensamiento que me devorara.
Estar en Chiapas ha sido una gran experiencia, me ha ayuado a entender un poco mis raíces y avolver a amar a mi país.
El jueves soñé con agua, ha sido el sueño más hermoso que he tenido en muchos años, fué como si mi espíriu regresara a las cascadas de Aguazul...estuve ahí otra vez, pero en esta ocasión iba yo sola y por un momento me sentí el único ser humano con permiso de entrar en ese paraíso, conmigo sólo estaba el agua y los espíritus de la selva...sentí que el alma se me desprendía del cuerpo ¡fue tan bello!
Creo que hoy entendí porque los antiguos veneraban a un dios del agua y un dios de la lluvia y un dios del sol....la verdad es que estando en medio de la selva todo parece divino, aún puedo sentir el perfume de la hierba, de esa vegetación salvaje que cubre todo, que invade qtodo y que sin ningún esfuerzo es capaz de ocultar los majestuosos rastros de una civilización milenaria, nunca olvidare el olor de todo ese verde, sé que nunca olvidaré ese perfume.
Tampoco olvidaré el sonido del agua entre las rocas, mienras las lava, las gasta y las amasa hasta que se transforman en figuras caprichosas. jamás en mi vida había visto tantos azules juntos y tan bellos todos, jamás había estado frente a un dragón de agua, rogandole con el pensamiento que me devorara.
Estar en Chiapas ha sido una gran experiencia, me ha ayuado a entender un poco mis raíces y avolver a amar a mi país.
El jueves soñé con agua, ha sido el sueño más hermoso que he tenido en muchos años, fué como si mi espíriu regresara a las cascadas de Aguazul...estuve ahí otra vez, pero en esta ocasión iba yo sola y por un momento me sentí el único ser humano con permiso de entrar en ese paraíso, conmigo sólo estaba el agua y los espíritus de la selva...sentí que el alma se me desprendía del cuerpo ¡fue tan bello!
Diciembre 2004
Chiapas, México
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